EDUCACIÓN
Educación / Política Educación Patrimonial / Proceso Participativo
- Entre mayo y julio de 2023 se realizó el proceso participativo para el diseño de la Política de Educación Patrimonial.
- La Política comenzará su implementación en el año 2024, estableciendo los principios para orientar el accionar educativo en patrimonio, articulando a las instituciones, agentes y comunidades.
Con el objetivo de contar con una primera Política de Educación Patrimonial en nuestro país, que permita orientar el quehacer en materia de educación patrimonial a nivel institucional e involucrando a todo el ecosistema patrimonial, durante el 2023 la Subsecretaría del Patrimonio Cultural, en conjunto con el Ministerio de Educación, lideró el proceso participativo para su diseño.
Entre los meses de mayo y julio de 2023 se realizó un taller de trabajo con la Mesa de Educación y Patrimonio del ministerio, la que reúne a todas las unidades educativas en patrimonio de la institución. Además, se implementó una consulta virtual que permitió recoger más de 1.500 encuestas, y que contó con la participación de más de 1.400 personas. Junto a ello, se implementaron 85 mesas de trabajo en las que participaron más de 500 personas en todas las regiones del país.
Este proceso de diálogo concluyó con cinco encuentros macrozonales, en los cuales se dieron a conocer las principales características y desafíos asociados a la educación patrimonial a nivel territorial, además de dar a conocer los resultados del proceso participativo para el diseño de la Política, así como las proyecciones en cuanto a su implementación. Participaron en estos encuentros diversos agentes vinculados a la educación patrimonial, ya sea desde el ámbito público o privado, incluyendo a organizaciones y personas que trabajan en contextos educativos formales, no formales e informales.
La Política de Educación Patrimonial constituye un significativo avance en la materia y busca aportar a una gestión sostenible y ciudadana de los patrimonios en Chile. Su implementación comenzará en el año 2024, sirviendo para posicionar a la educación patrimonial como un eje fundamental tanto a nivel institucional como en todo el ecosistema de los patrimonios en nuestro país.