La artesanía chilota en fibra vegetal es un oficio tradicional que nace y se enmarca como parte del desarrollo, apropiación y adaptación histórica de los habitantes de la isla de Chiloé con su entorno. Los objetos que se producen mediante esta actividad –como canastos, canastas, secadores, entre otro– entran a fortalecer y apoyar aspectos vinculados con el desarrollo cotidiano de los habitantes en su medioambiente, ya que estos objetos se elaboran pensando en el cómo la funcionalidad que portan, puede ayudar a ejecutar o ejercer las labores que ancestralmente se han llevado a cabo en los entornos de origen, en este caso caracterizados por la ruralidad.
Actividades como la recolección de productos, la alimentación de los animales, la producción de alimentos, entre otras, demandan un sinnúmero de acciones e intercambios tanto familiares como comunitarios que se facilitan a través de la creación de objetos artesanales, que en este caso se centran en productos confeccionados con fibras vegetales tales como el cunquillo, el voqui (boqui), el coirón, la quilineja, entre otros.
Esta artesanía es una práctica que se transmite de generación en generación y que contiene un sinnúmero de conocimientos asociados a técnicas artesanales que en sí representan un universo de manejo tecnológico. Este universo tecnológico se complementa con distintas áreas, posicionando así a esta artesanía como un patrimonio integral en el cual confluyen saberes sintetizados a través del “hacer” de los cultores, sean comunidades o personas. Un caso específico y que justifica esta relación, es por ejemplo, los conocimientos asociados a las formas de recolección de las fibras vegetales, al lugar de recolección y sus épocas asociadas.
Ver menos