El río La Ligua ha sido fundamental en el desarrollo de las comunidades que se asentaron a lo largo de su ribera por lo que no es de extrañar que al día de hoy la escasez hídrica y sequía que afecta a la zona y que en especial tienen al río seco sea algo que tenga muy afectado a la población, lo que incluso ha repercutido en que se levanten movimientos sociales en torno a este conflicto socio ambiental. Este ensayo plantea que los habitantes de la cuenca del río La Ligua además han valorado y destacado una serie de prácticas las cuales son bañarse en el río, pescar y la pequeña agricultura familiar. Estas demuestran que el río no solo posee una función hídrica, sino que además esta materialidad dada por el agua propicia que broten una serie de prácticas culturales que son esenciales para la identidad de los habitantes de la cuenca y que permiten que puedan encontrarse los unos con los otros generando sentimientos de pertenencia y cohesión social.