Este ensayo tiene como objetivo el dar cuenta de las tipologías de fanales del Niño Dios que posee el Museo La Merced de Santiago. También busca determinar la relación de esta colección con su espacio expositivo. Para ello, proponemos como hipótesis que el museo afecta a las colecciones que posee, les “hace algo” a las piezas que entran a formar parte de sus colecciones. Dichos efectos son parte del ejercicio normativo que el espacio expositivo ejerce sobre sus piezas, ya que las clasifica otorgándoles un número que las codifica, haciendo de la pieza un elemento inserto dentro de un conjunto, o sea que las estandariza y también, permite que se abran múltiples lecturas y formas de acercamiento a dichas piezas. En el caso de los fanales, el museo desarraiga a estas obras de su contexto original: celdas de monjas y casas particulares. El uso de los fanales en dicho contexto era eminentemente devocional, pues, esto cambia al ingresar las piezas a la institución museo. La relevancia de este ensayo para el ámbito temático en donde se inscribe, a saber, patrimonio y memoria, es la actualidad de la problemática entre las colecciones y sus espacios expositivos. Los fanales del Niño Dios son expresiones materiales del arte colonial, y cruzan el tiempo, ya que la figura central es del siglo XVIII, las cúpulas son agregadas en el siglo XIX y muchos de los elementos que constituyen el conjunto fanal, son del siglo XIX y siglo XX. Es decir, que estos artefactos que llamamos fanales, contienen diferentes materialidades que se han sensibilizado a través del tiempo. Abordarlos desde el presente en sus relaciones actuales con el acervo patrimonial del museo, constituye una apertura a considerar la valoración de estas expresiones con respecto a los criterios contemporáneos que manejamos sobre el campo patrimonial.